PICHI EPEW: ESCLAVITUD POR DEUDAS

“ESCLAVITUD POR DEUDAS”:
Que en ese tiempo en
el Chawra Kawín (Osorno 1883) había poco dinero, todo lo productivo estaba en
el norte. Se quedaba en la capital, o en los hierros de un ferrocarril que venía
avanzando selva al sur. Pocos lo creían en realidad, esos eran cuentos de seres
fantasiosos, nada podía ser más grande que un árbol ni tirar más fuego que un
volcán. Que la gente, en vez de aprender de la lenta sabiduría de las siembras
y la crianza, se acostumbró a comprar en las pulperías de alemanes o
cualquier otro pillo rico. Que para comprar debían tener plata y para tener
plata iban vendiendo sus pequeños trozos de tierra arrinconados y yermos. Que
la gente comenzó a ponerse pobre, a verse pobre y a sentirse pobre. Fue así
como se inventó la pobreza en el Chawra Kawin, al mismo tiempo que otros se
inventaron la riqueza. Ambas cosas no se conocían por estos lados y los colonos
la trajeron como novedad igual que sus máquinas y su cerveza. Entonces alguien
empezó “emprestando” los hijos por dinero, primero por un tiempo, luego por
otro tiempo más, hasta que ese tiempo era un para siempre. Que esos hijos se fueron
quedando y eran obligados a trabajar con crueldad, y bondad religiosa a la vez,
para que aprendieran que el esfuerzo trae beneficios, más si el esfuerzo es
gratuito. Que eso era esclavitud, regulada por normas de arriendo y por las
leyes chilenas siempre permisivas con los colonos y castigadoras para los hijos
de la tierra. Que además así se perdieron apellidos originarios, se
castellanizaron y muchos se awincaron sin entendimiento. Que
ellos olvidaron a sus familias naturales y se entremezclaron con las nuevas en una
tole-tole de parientes cruzados de nunca acabar. Que esos hijos abandonados por
deudas quedaron sin Ñuke Mapu, sin antepasados, ni
abuelos tutelares que los cuidasen y tuvieron que aprender de la luteranía
laboriosa, de dioses azotados y otras lacras todos los domingos, todos los
domingos. Hasta olvidaron su idioma original y no tuvieron jamás como contar
esta historia.
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